Como sociedad del conocimiento humano, la masonería no enseña; su mètodo no es de enseñanza, sino de aprendizaje, el cual facilita al miembro iniciado, a "aprender y aprehender" la informaciòn, bebiendo de las fuentes de sabidurìa de tan milenaria instituciòn y a la altura de los mètodos de aprendizaje màs avanzados en educaciòn de la edad moderna y postmoderna, donde la razòn humana es sometida a una dialèctica permanente por medio de discusiones respetuosas con libertad de pensamiento y tolerancia a las diferencias conceptuales y de actitudes.

El conocimiento masònico se encuentra inserto en sus sìmbolos, tradiciones orales, usos y costumbres. Por medio de la lectura e investigaciòn, sociodramas y dramatizaciones ritualistas, facilita a sus miembros activos la incorporaciòn de su visión, misión, filosofìa, principios y valores fundamentales para la autoformaciòn integral y su aplicaciòn en la vida diaria.