Si tienes un hijo…
haz que hasta los diez años te obedezca y sé su Maestro.
Hasta los veinte años, haz que te ame y sé su padre.
Y hasta la muerte, haz que te respete y sé su amigo.
ORÍGEN DE LA MASONERÍA
El establecer los orígenes de la masonería, es difícil y no se puede hacer sin pecar de poco rigor histórico. Sin embargo podría ser que la masonería operativa naciera en el seno de los gremios de albañiles que construyeron las grandes catedrales medievales. En el siglo XVII, la masonería operativa que era a la vez gremio, sindicato, escuela y cofradía, estaba a punto de desaparecer con la terminación de las ultimas catedrales.
Sin embargo en Inglaterra por la misma época, esta institución aceptaba miembros honorarios, cuyo fin y ocupación principal no era la construcción. Los llamaron masones "aceptados", hombres que se interesaban por la base moral, el simbolismo, la generosidad y la fraternidad de la institución.
En 1717 cuatro logias londinenses que se denominaban Goose and Gridiron, Crown Ale House, Apple Tree y Rummer and Grapes, se unieron y formaron la Gran Logia de Inglaterra, naciendo así la masonería especulativa que se convirtió en un maravillo proyecto para lograr que la humanidad se uniese por medio de los ideales de libertad, igualdad y fraternidad.
En el año 1723 dos hombres Jhon Th. Desaguilliers y James Anderson compilaron una serie de ideario que recogía el espíritu masón al que se le denomino: "Constituciones de Anderson" y que en adelante iban a ser la pauta a seguir por todos los miembros de orden.
Según ellos la catedral ya no sería el templo a construir, sino que el edificio que había de construirse sería la propia humanidad y el trabajo que antes se aplicaba a la piedra, a partir de aquel momento, sería sobre el hombre.
La masonería seria la reunión de hombres con un animo común inspirado por un intenso humanismo fraternal, en el que el sectarismo religioso o las ponencias políticas no tendrían cabida.
Durante el siglo XIX algunos sectores de las masonerías francesas y alemanas se alejaron de las Constituciones de Anderson, dando lugar a nuevas obediencias en la que los iniciales principios masónicos eran mantenidos pero se les unía un gusto por lo misterioso, un fuerte laicismo y anticlericalismo. Dando lugar a una masonería irregular o liberal.
Es por esto que la Masonería Regular es la que puede reivindicar el derecho de ser una Orden concebida en un momento de la historia, con la fidelidad a los principios de las constituciones, y que solo admite a hombres libres y de buenas costumbres que creen en un principio creador compatible con todas las religiones y creencias.